CARTA DE LA RED INTERNACIONAL DE ESTUDIOS DE DELINCUENCIA ORGANIZADA TRANSNACIONAL
El día treinta y uno del mes de mayo de dos mil veintidós, en la ciudad de Lisboa, en la Universidad Autónoma de Lisboa Luís de Camões, profesores e investigadores de varias universidades portuguesas y extranjeras, profesionales del ámbito del Derecho, están reunidos para el SIECO II – Seminario Internacional: Estudios de Delincuencia Organizada Transnacional en el ámbito internacional del proyecto de I+D Corpus Delicti – Estudios de Delincuencia Organizada Transnacional, con sede en Ratio Legis – Centro de Investigación y Desarrollo en Ciencias Jurídicas de la UAL, para presentar los estudios que han desarrollado sobre uno de los fenómenos que mina y provoca la decadencia del Estado de derecho y de las democracias.
Considerando que los temas de este evento – la responsabilidad penal de las personas jurídicas, las reformas penales materiales y procesales, nacionales y extranjeras, ante la delincuencia organizada, la influencia de los estudios de la política delictiva y de la criminología en las políticas persecutorias y modificaciones legislativas de cariz de seguridad y justicialista, el tráfico de seres humanos, el tráfico de drogas, el tráfico de armas, el terrorismo, la corrupción, las criptomonedas, el blanqueamiento, la tecnología, la ciberdelincuencia, la obtención, conservación y tratamiento de las pruebas penales y la cooperación jurídica internacional – conforman las cuestiones penales relevantes del discurrir jurídico de la actualidad, en el que destaca la inmensa variedad de tipologías delictivas a las que se dedican las organizaciones y las asociaciones criminales, los grupos y las bandas criminales, es urgente proceder, a lo largo de los próximos años, a un estudio sistematizado que profundice y amplíe el espectro material y procesual, así como organizativo, de la prevención y represión de los delitos.
Considerando que solo la ciencia puede ayudar y orientar a quienes toman las decisiones políticas y ejecutivas a planificar, diseñar, aprobar y ejecutar políticas de prevención y represión de la delincuencia organizada transnacional, cuyas raíces se encuentran en la base de la delincuencia masiva, asumimos esta carta como base de un compromiso científico de aproximar los estudios y los proyectos y observatorios de investigación y desarrollo científico de universidades de varios pueblos y, en conjunto, presentar las investigaciones y sus correspondientes resultados, debatirlos de forma que se puedan presentar propuestas no legislativas y propuestas legislativas dirigidas a la prevención de la delincuencia en general y de la delincuencia organizada transnacional.
Considerando que esta Carta es un instrumento académico-científico programático para que el pensamiento cultural jurídico-político-económico-social de varios pueblos, representados por cada uno de los miembros de este grupo de trabajo, se impone constituir un espacio científico de libre debate sobre todas las cuestiones de política legislativa, de interpretación y aplicación concreta de las normas inmanentes de aquella y los correspondientes resultados en el pulso real de la vida y en el pulso perceptivo de cada ciudadano y de toda la comunidad.
Considerando que la comunidad ansía una vida mejor, más justa, más libre, más solidaria y más humana, en la que la implantación de miembros de la delincuencia organizada transnacional en las estructuras de los Estados corroe la ética y los valores que rigen una sociedad democrática, corresponde a la academia científica preparar el camino, identificar las barreras y derribar los obstáculos impuestos a un sistema jurídico-político, jurídico-económico-financiero y jurídico-social basado en los valores de la dignidad de los seres humanos.
Considerando que una política delictiva del ser humano implica varias miradas, varios conocimientos y varias prácticas, es urgente que la Red Internacional incorpore a académicos, agentes del ámbito judicial – jueces, fiscales, promotores, abogados y policías–, agentes de las instancias informales de control, agentes de la economía y del sistema financiero y agentes de las relaciones internacionales y de la ciencia política de los diferentes pueblos de origen de quienes conforman la Red.
Considerando que el cumplimiento del objetivo de la Red Internacional exige una madurez científica y estructurada tautológica y metodológicamente, necesita una sede, se asume, aquí y ahora, el compromiso de elaborar el estatuto científico de la Red Internacional, que
apunta a edificar e implantar, durante los próximos meses, para que lo podamos aprobar los días veintitrés y veinticuatro de noviembre de dos mil veintidós, en esta ciudad y en esta Universidad, la sede de la Red Internacional.
Aceda aqui à carta de rede (em Português).
Considerando que los temas de este evento – la responsabilidad penal de las personas jurídicas, las reformas penales materiales y procesales, nacionales y extranjeras, ante la delincuencia organizada, la influencia de los estudios de la política delictiva y de la criminología en las políticas persecutorias y modificaciones legislativas de cariz de seguridad y justicialista, el tráfico de seres humanos, el tráfico de drogas, el tráfico de armas, el terrorismo, la corrupción, las criptomonedas, el blanqueamiento, la tecnología, la ciberdelincuencia, la obtención, conservación y tratamiento de las pruebas penales y la cooperación jurídica internacional – conforman las cuestiones penales relevantes del discurrir jurídico de la actualidad, en el que destaca la inmensa variedad de tipologías delictivas a las que se dedican las organizaciones y las asociaciones criminales, los grupos y las bandas criminales, es urgente proceder, a lo largo de los próximos años, a un estudio sistematizado que profundice y amplíe el espectro material y procesual, así como organizativo, de la prevención y represión de los delitos.
Considerando que solo la ciencia puede ayudar y orientar a quienes toman las decisiones políticas y ejecutivas a planificar, diseñar, aprobar y ejecutar políticas de prevención y represión de la delincuencia organizada transnacional, cuyas raíces se encuentran en la base de la delincuencia masiva, asumimos esta carta como base de un compromiso científico de aproximar los estudios y los proyectos y observatorios de investigación y desarrollo científico de universidades de varios pueblos y, en conjunto, presentar las investigaciones y sus correspondientes resultados, debatirlos de forma que se puedan presentar propuestas no legislativas y propuestas legislativas dirigidas a la prevención de la delincuencia en general y de la delincuencia organizada transnacional.
Considerando que esta Carta es un instrumento académico-científico programático para que el pensamiento cultural jurídico-político-económico-social de varios pueblos, representados por cada uno de los miembros de este grupo de trabajo, se impone constituir un espacio científico de libre debate sobre todas las cuestiones de política legislativa, de interpretación y aplicación concreta de las normas inmanentes de aquella y los correspondientes resultados en el pulso real de la vida y en el pulso perceptivo de cada ciudadano y de toda la comunidad.
Considerando que la comunidad ansía una vida mejor, más justa, más libre, más solidaria y más humana, en la que la implantación de miembros de la delincuencia organizada transnacional en las estructuras de los Estados corroe la ética y los valores que rigen una sociedad democrática, corresponde a la academia científica preparar el camino, identificar las barreras y derribar los obstáculos impuestos a un sistema jurídico-político, jurídico-económico-financiero y jurídico-social basado en los valores de la dignidad de los seres humanos.
Considerando que una política delictiva del ser humano implica varias miradas, varios conocimientos y varias prácticas, es urgente que la Red Internacional incorpore a académicos, agentes del ámbito judicial – jueces, fiscales, promotores, abogados y policías–, agentes de las instancias informales de control, agentes de la economía y del sistema financiero y agentes de las relaciones internacionales y de la ciencia política de los diferentes pueblos de origen de quienes conforman la Red.
Considerando que el cumplimiento del objetivo de la Red Internacional exige una madurez científica y estructurada tautológica y metodológicamente, necesita una sede, se asume, aquí y ahora, el compromiso de elaborar el estatuto científico de la Red Internacional, que
apunta a edificar e implantar, durante los próximos meses, para que lo podamos aprobar los días veintitrés y veinticuatro de noviembre de dos mil veintidós, en esta ciudad y en esta Universidad, la sede de la Red Internacional.